Energía sin química en un botecito

Energía en un botecito suena raro. Pero vamos con una explicación más científica. 

La información general de la historia de las flores de Bach y para qué sirve cada una, es fácil de encontrar. Está al alcance de un solo click. La función del potencial de estos elixires es a donde quiero llegar en este escrito.

Porque hablar de energía suena a estar con los pies fuera del tiesto. Y sin embargo, es más fácil comprenderlo desde un lado más científico. 

¿Cómo se puede explicar que haya energía en un botecito pequeño con un letrero que dice flor de Bach, cuando en realidad solo es agua y alcohol como conservante?

Si cambiamos la palabra energía por vibración se comprende mejor. Se acepta mejor la explicación. 

Si te digo que un átomo está formado por un núcleo de protones y neutrones, rodeado por u  enjambre de electrones unidos electromagnéticamente. Ya nos metemos en terreno demostrable.

A dónde quiero llegar con ésto. Primero resaltar la palabra electromagnética. La electricidad es energía, vibra y hace vibrar.

Los átomos forman elementos químicos y éstos bioelementos forman células. Nuestro cuerpo está formado por células, por lo tanto,  de energía.

Nuestros tejidos son energía hecha materia. Y en nuestro cerebro cabe la posibilidad de entenderlo con esta pequeña explicación de electrones. Vamos a ir más allá. 

Si meto un cable conectado a la corriente eléctrica en un recipiente con agua, no se me ocurriría meter un solo dedo. Porque me pasaría la corriente y me haría daño como poco. Incluso esa energía (corriente eléctrica) podría modificar algunas funciones de mi cuerpo como el ritmo cardíaco, dejarme cansada, mareada o entumecida. 

La electricidad está dentro del recipiente aunque no podamos verla ni oírla ni olerla. ¡La electricidad también son electrones y protones! Solo la vemos cuando actúa, cuando se enciende la luz, se mueven aparatos, etc.

Ya te haces a la idea de por dónde voy. Las flores de Bach actúan mediante el mismo sistema. El agua que contiene cada elixir floral está cargado con la energía de la planta o flor. Y pasa a nuestro cuerpo al tomarla o estar en contacto con ella.

Así no se te hace tan raro comprender la palabra energía. Y porqué unas gotas de agua cambian algo dentro de ti.

Para captar la vibración de la planta o flor, se mete sencillamente la planta dentro de agua y se deja un tiempo. Al sacar, no queda ninguna sustancia química. Sin embargo, ya ha quedado la información que necesitamos y por eso se llama elixir.

Queda más por explicar para llegar a una conclusión lógica. Y es ¿qué hace esa energía en mi?

Cuando tienes una amiga muy graciosa, de esas personas que con solo estar a su lado ya estás de buen humor. O aunque estés triste terminas riendo porque cada cosa que dice tiene gracia, te das cuenta del poder que tiene su buen rollo. Su actitud, su cercanía te transmite ganas de reír o por lo menos predisposición a la diversión. 

Bien, seguimos. Cada flor tiene unas características especiales con la capacidad de trasladártelas cuando estás cerca, entras en contacto con ellas. Y qué características? 

Tenemos colores, formas, tamaños, olores que diferencian unas flores de otras y nos evocan sensaciones, ¿verdad? Esta amiga Graciosa de la que hablamos también tiene color de ojos, de pelo, un estilo de vestir, las palabras que usa, los gestos, el tono de voz. Pero ¿Cómo se ve realmente esa gracia que tiene dentro d ella? La gracia no se palpa, no hule, no se ve, pero está. 

Las flores de Bach evocan paciencia, autoestima, valor, ánimo, etc. tienen esa vibración y, al tomarlas nos la transmiten. Así de fácil. Y poco a poco cambia nuestra propia vibración. Cambian las emociones y los pensamientos.

La energía es vibración,  es el movimiento de los electrones, neutrones y protones. Se puede ver convertido en materia o puede ser invisible a nuestros ojos. Aunque si podemos ver cómo actúa.

Me gusta decir que las flores de Bach tienen vibración. Por lo tanto movimiento. Y ese movimiento es el que genera cambios dentro de mi, en mi vibración. Ya sea demasiado rápido (nervios, ira, control excesivo) o demasiado lento (depresión, tristeza, abatimiento). Ahí es dónde y cómo nos ayudan las flores de Bach, en poner el movimiento, la vibración en la medida justa.